La cirugía LASIK (Laser-Assisted In Situ Keratomileusis) es un procedimiento oftalmológico rápido, seguro y altamente eficaz que corrige problemas refractivos como miopía, hipermetropía y astigmatismo, eliminando o reduciendo significativamente la dependencia de anteojos o lentes de contacto.
Es una de las intervenciones más realizadas en todo el mundo y también en Chile, gracias a su alta precisión, bajo riesgo de complicaciones y recuperación casi inmediata. El LASIK utiliza tecnología láser de última generación para remodelar la córnea, permitiendo que la luz se enfoque correctamente sobre la retina, mejorando la agudeza visual.
El LASIK se realiza en ambulatorio y dura tan solo 10 a 15 minutos por ojo. No requiere hospitalización ni puntos de sutura. El proceso incluye:
En muchas clínicas, se utiliza tecnología láser femtosegundo, que hace el procedimiento aún más preciso, totalmente sin bisturí.
Los candidatos ideales son personas que:
Antes de la cirugía se realiza una evaluación oftalmológica completa, incluyendo topografía corneal, paquimetría y exámenes de agudeza visual, para confirmar si el paciente es apto.
Como todo procedimiento quirúrgico, el LASIK conlleva algunos riesgos, aunque son poco frecuentes. Los efectos secundarios más comunes en los primeros días pueden incluir:
Con un adecuado examen previo y seguimiento postoperatorio, estos efectos suelen resolverse sin complicaciones.
La cirugía LASIK es una excelente opción para quienes buscan independencia visual y calidad de vida, especialmente en personas jóvenes o activas. Gracias a su rapidez, seguridad y excelentes resultados, cada vez más pacientes en Chile optan por este procedimiento.
Si estás cansado de los anteojos o lentes de contacto, agenda una evaluación oftalmológica y descubre si el LASIK es para ti.